«El entusiasmo con Kamala Harris es enorme, una sensación parecida a la que hubo con Obama en 2008»

Así lo afirmó la profesora de Ciencias Políticas de la Universidad de Richmond, Jennifer Pribble, quien también se refirió a como juega en el nuevo contexto el candidato a vice de los Demócratas, Tim Walz.

La destacada politóloga Jennifer Pribble, sostuvo que la nominación de Kamala Harris como aspirante a la Casa Blanca por el Partido Demócrata, fue «un antes y un después» en la campaña electoral para elegir al sucesor de Joe Biden.

«Es llamativo el nivel de energía, de entusiasmo que generó en los jóvenes la fórmula Harris-Walz, hablé con quienes participaron de los últimos eventos del partido y me cuentan que en las salas la sensación es como la de 2008 con (Barack) Obama, o aún más», sostuvo la mencionada profesora en diálogo con el programa Perspectiva (Radiomundo, Uruguay).

La experta señaló que la postulación de Kamala generó una ola de expectativa de cambio en simpatizantes demócratas, y la motivación en muchos independientes confundidos, que si bien rechazaban a (Donald) Trump, dudaban de las condiciones de Biden para afrontar un nuevo período.

La politóloga Jennifer Pribble, analizó los efectos de la postulación de K Harris

Pribble deslizó que «Kamala como mujer negra, joven, hija de una mamá de la India, representa un perfil distinto al de Biden que venia perdiendo apoyo mucho antes del desafortunado debate en la CNN. «La gente vio que el partido Demócrata reconoció el problema, escuchó a sus bases frente a las reticencias de las elites de la estructura a cambiar, y se puso de pie».

En cuanto a la falta de popularidad que se le achaca a Harris, la analista estadounidense dijo que no le parece tan así. «Ocurr que ella (por Harris) tenía un perfil muy bajo, aunque tras un fallo de la Suprema Corte salió en defensa de los derechos reproductivos; la otra clave es la expectativa que genera ante el peligro real para la democracia -que gran parte de la población- percibe ante un nuevo gobierno de Trump, pero que no se sentía movilizada por Biden a participar».

Por otra parte, Pribble considera importante que sea Tim Walz (gobernador de Minnesota) quien compartirá la fórmula con Harris, pues le posibilitaría a la dupla Demócrata contar con adhesiones en zonas rurales y en el middle america atraídos por el sesgo anti elite de Waltz. Sobre el mismo, deslizó que «es docente y entrenador de fútbol americano, nacido en Nebraska fue a la Guardia Nacional, y en sus 12 años en el Congreso respaldó las demandas de los ex militares. En cuanto a la portación de armas, modificó su posición inicial a partir de algunas tragedias; no es que esté en contra, pero es partidario de exigir controles muy estrictos».

Consultada acerca de si se esperaba esa designación, la entrevistada expresó que le resultó sorpresiva (se esperaba quizá que sea (Josh) Shapiro político estrella del partido, gobernador de Pensilvania), y que conocía de Walz por ejemplo el posicionamiento que tomó en su Estado frente al asesinato de George Floyd, pero no tanto sus posturas en diferentes temas. En definitiva, es moderado (v.gr: está en contra de penalizar el consumo de cannabis, pero tiene también posiciones centristas.

Hace unos días una afirmación de Walz se volvió viral cuando definió a los postulantes republicanos como «gente rara».

La fórmula Demócrata Harris-Walz

La polítloga agregó como dato a tener en cuenta, que el tercer candidato (Robert) Kennedy que le quitaba votos a Biden, ahora parecería lo hace con el candidato del Partido Republicano. «Es un político extraño, con elementos de Trump, pero de una familia demócrata», explicó.

En cuanto a las encuestas de la semana pasada (que dan unos pocos puntos a Harris por arriba de Trump) la también especialista en Relaciones Internacionales de la Universidad de la capital de Virginia, indicó que se debe ser cauteloso, porque cuando hay candidatos nuevos siempre hay un impulso que habrá que ver si se sostiene.

Las reacciones de la opinión pública suelen ser imprevisibles, a tal punto que tras el atentado contra Trump, la victoria del magnate, ex presidente parecía asegurada.

«Hay crecimiento económico, la desocupación sigue siendo baja, pero estamos en un país hiperpolariado, es un mundo nuevo; el cambio de escenario genera alegría en mucha gente, en no ver un futuro tan gris; mas en definitiva hay que recordar que una parte del electorado ya se definió por Harris o Trump, en tanto un sector importante de la población que no sigue mucho las noticias, está viviendo su vida y un par de semanas antes tomará su decisión», concluyó Pribble.

Harris en la senda de Obama (ilustración de tapa: «La Voz de Galicia»).

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