Un par de cambios en los noticieros de Televisa encendieron las alarmas. Especialmente, los analistas de medios hicieron foco en el reemplazo de Denise Maerker del informativo del prime time.
Televisa es la cadena más importante del país azteca y un gigante en el mercado hispanoamericano, más aún desde la integración con Univisión que apuntó básicamente a competir en el streaming.
Pero yendo a lo concreto, llamó la atención que a poco de andar el 2023 fueron desplazadas de los espacios de noticias dos mujeres cuyos espacios tenían muy buen rating, la mencionada Maerker conductora de En Punto, y Paola Rojas de Al Aire el noticiero matutino.
La despedida de esta última el pasado 6 de enero generó el interés de nuestra redacción ya que se trata de una periodista conocida también por el ciclo Netas Divinas (que comparte con cuatro compañeras en el que tratan con un enfoque femenino temas del espectáculo y la vida cotidiana).
De todos modos, el canal de las Estrellas salió a aclarar que las conductoras salientes ocuparán un lugar relevante en la compañía: Rojas en el canal digital (N+Media) -al cual Televisa está apostando muchas fichas- y Maerker se encargará de la producción ejecutiva de generación de noticias, y de un ciclo de investigaciones periodísticas.
Asimismo, los reemplazantes de Rojas y Maerker son periodistas con destacadas trayectorias: respectivamente: Genaro Lozano,-politólogo de tendencia liberal y columnista en periódicos como Reforma– a la mañana; y Enrique Acevedo -que viene de estar a cargo de This Morning por la norteamericana CBS– por la noche (el co conductor de En Punto, José Luis Arévalo, pasa a encabezar el ciclo que deja Lozano, H21).
Cabe destacar que Por las Mañanas – nombre que sustituye al Al Aire- con Lozano al frente (de 8 a 9 hora mexicana) luce dinámico y atractivo; además de ser una mirada a las noticias sin casi editorializar.

Polarización
Entonces, ¿porque se originaron las especulaciones al punto que también CNN Radio se hizo eco?
Sobre estos cambios, hay posiciones diversas: Hay quienes han sostenido que siempre las renovaciones -si se mantiene la calidad- son positivas; otros deslizan que todo se irá tiñendo por la política a medida que se acerque la fecha de elecciones presidenciales en México (el año que viene) -donde como en casi todo el mundo se han polarizado a las audiencias-.
Por último, hubo algunas opiniones que apuntaron a que el género femenino pierde cierta represantatividad con este giro, volviendo atrás con el desafío que resultó poner mujeres al frente de los principales noticiarios.

Como señala Natalie Kritoeff en el artículo que se reproduce más abajo, Maerker había sido la primera sorprendida cuando como mujer se la escogió para la tarea que desempeñó durante casi una década en Televisa.
La periodista del New York Times hace hincapié en la polarización y el posicionamiento que toma el público, porque es algo cada vez más habitual -profundizado con el auge de las redes- la intolerancia con quienes buscan escaparle a los extremos.
Los defensores de Maerker dicen que la salida de la pantalla de Maerkel es una pérdida para la objetividad en un país cada vez más dividido. Sus críticos, en cambio, sostienen que su enfoque en realidad es demasiado suave y ya no tiene lugar en el aguerrido escenario mediático del México actual.
El jefe del Ejecutivo mexicano, Manuel López Obrador, suele hacer sus conferencias de prensa de cada mañana y no se privó en una de ellas de despacharse contra Maerkel, sin embargo no tuvo una respuesta acalorada de la misma. Se limitó a deslizar que es el estilo del mandatario.
En la siguiente nota del NY Times se presenta el tema en su dimensión.
Más allá que el nuevo esquema pueda estar motivado por una decisión innovadora y tomado en cuenta la capacidad de los reemplazantes, hay cuestiones que son ciertas y habrá que ver la evolución de los programas en cuestión.
El rating no acompaña las posturas moderadas. Hay que «jugarse a fondo», agitar el avispero, no bajar la guardia para sobrevivir en el medio. Y México parece no ser la excepción.